Nepal 2025: Cómo la App Bitchat de Jack Dorsey se Volvió Viral durante las Protestas y la Censura
Las calles de Katmandú ardían. La furia de una generación, hastiada por la corrupción, se materializaba en protestas masivas que desafiaban al poder. En medio del humo y la confusión, otro frente se abrió: el digital. Cuando el gobierno apagó las redes sociales para silenciar las voces disidentes, una aplicación hasta entonces marginal experimentó un crecimiento meteórico.
En pocos días, más de 48.000 nepaleses descargaron bitchat, la aplicación descentralizada de Jack Dorsey. Este evento no es un hecho aislado; es el caso de estudio más reciente que plantea una pregunta urgente: ¿estamos presenciando el auge definitivo de la tecnología de la libertad?
La Conexión entre Protesta, Censura y Tecnología en Nepal
Este episodio en Nepal sirve como un ejemplo paradigmático de cómo la tecnología puede convertirse en una herramienta fundamental para la resistencia civil y la defensa de los derechos digitales en contextos de autoritarismo y censura.
El Contexto de la Crisis Nepalí
Las Acusaciones de Corrupción
El detonante de la crisis fue una serie de graves acusaciones de malversación de fondos públicos y falta de transparencia contra el entonces Primer Ministro, KP Sharma Oli. Las investigaciones periodísticas revelaron un entramado de desvío de dinero que conmocionó a una ciudadanía ya de por sí cansada de las élites políticas.
La presión fue tal que Oli se vio finalmente forzado a presentar su renuncia, un hecho que, lejos de calmar los ánimos, avivó la indignación y el deseo de una purga más profunda en las instituciones.
Estallido Social
La respuesta ciudadana, liderada en gran medida por una Generación Z digitalmente nativa y políticamente consciente, fue inmediata y contundente. Las protestas se intensificaron rápidamente, culminando en enfrentamientos trágicos con las fuerzas de seguridad.
El saldo oficial reportó al menos 19 fallecidos y cientos de heridos, luego de que se hiciera uso de fuego real y gases lacrimógenos para dispersar las concentraciones. La imagen de edificios gubernamentales incendiados dio la vuelta al mundo.
La Medida de Censura
Ante la incapacidad de contener el descontento en las calles, el gobierno ejecutó una jugada previsible pero drástica: la prohibición total de Facebook, Instagram, WhatsApp y YouTube.
El argumento oficial fue la necesidad de frenar la difusión de contenido anti-gubernamental y discursos de odio. Sin embargo, el efecto real fue el contrario: avivó las llamas de la protesta y creó una necesidad urgente y colectiva de encontrar alternativas de comunicación que estuvieran fuera del alcance de la censura estatal.
¿Qué es Bitchat y por qué fue la alternativa perfecta?
Un Salvavidas Tecnológico
En este escenario de aislamiento digital, bitchat, una aplicación de mensajería de código abierto desarrollada por Block, la empresa de Jack Dorsey, emergió como un salvavidas.
Según los datos del desarrollador «callebtc», la aplicación pasó de tener menos de 3.344 descargas a alcanzar la cifra de 48.781 en apenas una semana. Este crecimiento exponencial no fue producto de una campaña de marketing, sino de una recomendación de boca en boca entre ciudadanos desesperados por organizarse y compartir información.
Cómo Funciona la Magia
La clave del éxito de bitchat reside en su tecnología subyacente. A diferencia de WhatsApp o Telegram, que dependen de servidores centrales que un gobierno puede bloquear, bitchat opera sobre una red mesh (en malla) que utiliza Bluetooth.
Esto permite la comunicación peer-to-peer (P2P) entre dispositivos cercanos sin necesidad de una conexión a internet tradicional. En esencia, crea una red independiente y fantasma que es extremadamente difícil de derribar.
Características Clave de Privacidad
De acuerdo con su whitepaper, las ventajas de bitchat son fundamentales para su propósito: no requiere de servidores centrales, no pide registro con email o número de teléfono (preservando el anonimato) y toda la comunicación está encriptada de extremo a extremo. Se trata de la materialización técnica del derecho a la privacidad.
El Patrón Indonesia
Crucialmente, el caso de Nepal no es una anomalía. Tan solo la semana anterior, durante unas masivas protestas contra la corrupción en Indonesia, bitchat experimentó un fenómeno similar, con 11.324 descargas en ese país.
Este patrón paralelo confirma que estamos ante una tendencia emergente donde la ciudadanía global está adoptando activamente herramientas descentralizadas para defender su derecho a la comunicación.
Una Tendencia Global: La Lucha por la Comunicación Privada
El Ecosistema de Apps Resistentes a la Censura
Bitchat es solo una soldado más en un ejército creciente de «apps de la libertad». Plataformas como Signal (con su fuerte enfoque en la privacidad), Session (que ni siquiera requiere número de teléfono), Status o Damus operan bajo principios similares de descentralización y resistencia a la censura, ofreciendo un abanico de opciones para usuarios conscientes de su seguridad digital.
La Contratendencia: El Caso de la UE
Mientras en Nepal e Indonesia la ciudadanía adopta estas herramientas, en occidente se libra una batalla legislativa que podría restringirlas severamente. El mejor ejemplo es la controvertida propuesta de ley de la Unión Europea conocida como «Chat Control».
Esta legislación, que aún depende de votaciones clave como la de Alemania, busca obligar a las plataformas a escanear mensajes privados *antes* de ser encriptados en busca de contenido ilegal. De aprobarse, effectively eliminaría el concepto de privacidad digital en la UE y haría tecnológicamente imposible el funcionamiento de apps como bitchat.
El Gigante Centralizado: Meta
Para dimensionar el desafío, basta con mirar los 3.48 mil millones de usuarios diarios que tienen las apps de Meta. Las plataformas descentralizadas son todavía un nicho en comparación con este gigante centralizado que monetiza los datos de sus usuarios.
Sin embargo, la diferencia filosófica es abismal: por un lado, un modelo de negocio que explota la información personal; por el otro, herramientas diseñadas con el único propósito de protegerla.
El Futuro de la Comunicación bajo Protesta
Los eventos de Nepal en 2025 son un testimonio poderoso de cómo la tecnología puede empoderar a la ciudadanía en los momentos más críticos, sirviendo como un instrumento de resistencia pacífica y organización social.
Bitchat y sus similares no destronarán a los gigantes centralizados a corto plazo, pero su valor como herramienta de soberanía digital y resiliencia democrática está más claro que nunca.
La pregunta que queda flotando en el aire no es técnica, sino ética: en un mundo cada vez más digitalizado, ¿estamos dispuestos a ceder nuestra privacidad a cambio de conveniencia, o la valoraremos y defenderemos como un derecho fundamental?
¿Qué opinas sobre el uso de estas apps? ¿Crees que son necesarias?