Turquía otorgará a Masak poder para congelar cuentas de criptomonedas: Todo lo que necesitas saber

Ayudanos a compartir esta información

Turquía otorgará a Masak poder para congelar cuentas de criptomonedas: Todo lo que necesitas saber

El panorama de las criptomonedas en Turquía está a punto de dar un giro significativo. El gobierno turco ultima una legislación que otorgará a su organismo de supervisión financiera, Masak, la potestad de congelar e incluso cerrar cuentas de criptoactivos. Esta medida, enmarcada en una ofensiva más amplia contra el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo, plantea una pregunta inevitable: ¿cómo afectará esta nueva capacidad de intervención a los millones de ciudadanos turcos que utilizan criptomonedas a diario?

Los nuevos poderes de Masak sobre las criptomonedas

La ley en desarrollo busca ampliar explícitamente el mandato de Masak, cuyas facultades actualmente se aplican al sistema bancario tradicional, para abarcar el universo de los activos digitales. Esto significa que su radio de acción se extenderá sobre los exchanges de criptomonedas, las instituciones de dinero electrónico y los sistemas de pago operativos en el país.

Las acciones concretas que podrá tomar

Las nuevas capacidades no son abstractas. Masak tendrá la autoridad para congelar y cerrar cuentas que sean identificadas como sospechosas. Adicionalmente, podrá imponer límites específicos a las transacciones y, de manera crucial, crear listas negras de carteras digitales (wallets) vinculadas a actividades ilícitas. Este movimiento no es aislado; responde directamente a la necesidad de Turquía de alinearse con los estándares internacionales del GAFI (Grupo de Acción Financiera Internacional), un organismo global clave en la lucha contra el lavado de capitales.

La carrera de Turquía por cumplir con los estándares globales

El contexto inmediato de esta iniciativa es la presión internacional. Turquía ha estado bajo el escrutinio del GAFI y necesita demostrar progresos tangibles para salir de su «lista gris», una categoría que señala deficiencias en su arquitectura contra el lavado de dinero.

La presión del GAFI

El GAFI establece las normas que la comunidad financiera global sigue para combatir las finanzas ilícitas. Para Turquía, cumplir con estas recomendaciones es esencial para restaurar la confianza internacional y facilitar las transacciones financieras con el exterior.

El enfoque en las «cuentas alquiladas»

Un blanco específico de esta legislación son las llamadas «cuentas alquiladas», una práctica donde los delincuentes pagan a ciudadanos comunes por el uso de sus cuentas bancarias o de inversión para realizar fraudes o operar en apuestas ilegales. Esta medida se complementa con otras acciones recientes, como las nuevas reglas del Ministerio de Hacienda para que los exchanges recopilen información detallada de las transacciones y el bloqueo de plataformas no autorizadas por la Junta de Mercados de Capitales a mediados de 2024.

Un mercado cripto pujante en un entorno económico complejo

Para entender el impacto potencial de esta ley, es crucial comprender la singularidad del ecosistema cripto en Turquía. Según el Índice Global de Adopción de Cripto de Chainalysis (el dato más reciente disponible en 2025), el país se posiciona en el puesto 14 a nivel mundial, reflejando una adopción minorista e institucional en crecimiento.

Turquía, un líder en adopción

Este alto nivel de adopción no es casual. Está intrínsecamente ligado a la búsqueda de refugio por parte de la ciudadanía ante la persistente devaluación de la lira turca, en declive desde 2018. Los turcos han recurrido masivamente a las stablecoins y al Bitcoin para proteger sus ahorros de la inflación.

La lira turca y la búsqueda de refugio

Una comparación es elocuente: en 2020, un Bitcoin valía aproximadamente 100,000 liras turcas. A inicios de 2025, esa cifra supera los 4.6 millones de liras. Esta dramática diferencia refleja no solo la apreciación del activo digital, sino la profunda depreciación de la moneda local. Aquí yace la tensión central: una población que adopta las cripto por necesidad económica se enfrenta a un gobierno que debe regular el sector para cumplir con estándares globales.

¿Qué significa esto para los usuarios e inversores?

Ante este escenario, es fundamental separar la realidad de la especulación. En primer lugar, el comercio y la inversión en criptomonedas siguen siendo legales en Turquía. Hasta octubre de 2024, las ganancias no estaban sujetas a impuestos, aunque es probable que un marco fiscal más definido sea el próximo paso en la agenda regulatoria.

Legalidad vs. Supervisión

El debate se centra, por tanto, en el equilibrio entre seguridad y control. Por un lado, una supervisión más estricta podría aportar mayor legitimidad y seguridad al ecosistema, protegiendo a los inversores de actividades fraudulentas. Por otro lado, implica un aumento sin precedentes de la vigilancia estatal sobre las transacciones financieras personales.

Mayor seguridad vs. control financiero

El proyecto de ley se presentará próximamente ante la Asamblea Nacional para su debate y aprobación, aunque aún no hay un calendario oficial definido. Este paso representa un movimiento más en la tendencia global de regular el espacio cripto, un intento por equilibrar la innovación financiera con la mitigación de riesgos.

Conclusión

La decisión de Turquía de empoderar a Masak para intervenir en cuentas de criptomonedas es un esfuerzo claro por alinearse con el consenso regulatorio internacional y saldar una deuda pendiente con el GAFI. Sin embargo, se implementa en un contexto nacional único, donde los activos digitales son para muchos un salvavidas financiero. Si bien la medida busca combatir el crimen y dotar de mayor transparencia al mercado, marca sin duda un punto de inflexión hacia un ecosistema cripto más vigilado. El impacto en la experiencia del usuario, quien hasta ahora operaba con relativa libertad, será directo y redefine la relación entre el estado y las finanzas descentralizadas en el país.

Related Posts