Bitcoin Core vs Knots: Por qué las instituciones ignoran el debate interno según Galaxy Digital
En el mundo técnico de Bitcoin, las actualizaciones y debates entre desarrolladores suelen marcar el ritmo de la evolución de la red. Sin embargo, no todas estas discusiones logran captar la atención de quienes mueven el capital. Recientemente, la controversia entre Bitcoin Core y Bitcoin Knots ha puesto de manifiesto una brecha significativa entre la comunidad técnica y los grandes inversores. Alex Thorn, jefe de investigación de Galaxy Digital, ha arrojado luz sobre este fenómeno, revelando por qué las instituciones permanecen ajenas a un debate que, para muchos en el ecosistema, parece crucial.
¿En qué consiste el debate Bitcoin Core vs Knots?
El conflicto surgió a raíz de la actualización Bitcoin Core v30, en un contexto donde Bitcoin cotiza alrededor de los $95,049. Por un lado, Bitcoin Knots aboga por filtrar transacciones consideradas «no financieras» —como mensajes o contenido potencialmente ilegal— para combatir el spam y optimizar la red. Por otro, Bitcoin Core defiende mantener la red permisiva, argumentando que cualquier restricción podría fragmentar la red y comprometer los principios de descentralización que han guiado a Bitcoin desde sus inicios. Esta disputa ha dividido a desarrolladores y operadores de nodos, generando tensiones en los círculos más técnicos.
Encuesta reveladora: La mayoría de instituciones ignoran la polémica
Galaxy Digital realizó una encuesta entre 25 inversores institucionales para medir el impacto real de este debate. Los resultados fueron elocuentes: el 46% de los consultados desconocía por completo la existencia de la polémica, mientras que un 36% se mostró indiferente o no tenía una opinión formada. Solo un 18% expresó abierto apoyo a la postura de Bitcoin Core. Alex Thorn resumió así la situación: «El capital real, los inversores reales, mineros y reguladores no ven ningún problema. Su solución no resuelve el problema (falso) que afirman que es real».
Alex Thorn explica por qué el tamaño de la muestra no invalida los resultados
Ante las críticas que cuestionan el reducido tamaño de la muestra, Thorn defendió la validez de los datos. Según el experto, sus conclusiones se basan no solo en la encuesta, sino en numerosas conversaciones mantenidas con «ballenas», mineros y reguladores durante los últimos meses. «Los resultados coinciden exactamente con lo que he observado», afirmó Thorn, subrayando que la percepción de irrelevancia entre estos actores clave es generalizada. En un ecosistema donde las decisiones institucionales pueden alterar el rumbo de Bitcoin, esta indiferencia resulta significativa.
Tres escenarios futuros para Bitcoin según el experto de Galaxy
Thorn proyecta tres posibles desenlaces para este debate en 2025:
Escenario 1: Desvanecimiento de la polémica
El primer escenario —y más probable— es que la polémica se desvanezca por falta de interés general, sin consecuencias prácticas para la red.
Escenario 2: Impacto en la adopción
El segundo supone que el temor generado por la controversia aleje a nuevos adoptantes, incluso si las propuestas de fork no prosperan. Aquí, el recuerdo del polémico BIP que amenazaba con consecuencias legales podría influir en la percepción pública.
Escenario 3: Cambios perjudiciales
El tercer escenario, aunque menos probable, implicaría la adopción de cambios que, lejos de solucionar los problemas, dañen la adopción de Bitcoin.
Conclusiones clave para inversores en 2025
La falta de preocupación institucional podría, irónicamente, acelerar la adopción de Bitcoin al evitar distracciones técnicas. No obstante, esta indiferencia también conlleva riesgos: ¿están las instituciones subestimando vulnerabilidades a largo plazo? Para los inversores, el consejo es claro: en un mercado donde Bitcoin ronda los $95,000, es más productivo enfocarse en factores macro como la regulación y la adopción masiva que en debates internos que, por ahora, no trascienden los círculos técnicos.
En definitiva, el estudio de Galaxy Digital refleja una realidad innegable: mientras los desarrolladores discuten sobre posibles amenazas, los grandes actores del mercado priorizan problemas tangibles. Como señala Thorn, «el capital real no ve ningún problema», lo que invita a reflexionar sobre la necesidad de alinear las prioridades técnicas con las demandas del ecosistema global. En 2025, la madurez de Bitcoin dependerá de su capacidad para resolver desafíos reales, no hipotéticos.
«El capital real, los inversores reales, mineros y reguladores no ven ningún problema» — Alex Thorn, Galaxy Digital














