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¿Bitcoin a $40,000? El Análisis Bajista de un Gurú Macro y la Respuesta de la Comunidad

¿Bitcoin a $40,000? El Análisis Bajista de un Gurú Macro y la Respuesta de la Comunidad

El mercado de criptoactivos se encuentra sacudido por una advertencia contundente. Luke Gromen, reconocido analista macroeconómico y una voz respetada en materia de política monetaria, ha adoptado una postura tácticamente bajista sobre Bitcoin, sugiriendo un posible camino hacia los $40,000 para 2026. Este giro sorprende, ya que Gromen fue durante años un defensor de la tesis que agrupaba a Bitcoin y al oro como refugios clave. Su cambio de tono llega en un momento de volatilidad, con BTC cayendo recientemente por debajo del nivel psicológico de los $90,000.

Este artículo desglosará los tres pilares de su argumentación, contrastará las críticas de la comunidad Bitcoin y pondrá este debate en la perspectiva crucial del largo plazo.

El Giro de Luke Gromen: De Aliado a Escéptico Táctico

Para entender su giro, primero hay que comprender su tesis central, que permanece intacta: el «debasement trade». Esta es la apuesta a que la devaluación constante de las monedas fiduciarias, impulsada por niveles históricos de deuda (con ratios deuda/PIB en máximos en 2025) y presiones inflacionarias persistentes, erosionará su valor. Tradicionalmente, Gromen veía en Bitcoin y el oro los vehículos idóneos para protegerse.

Sin embargo, su postura ha dado un vuelco radical. En una reciente aparición en el podcast RiskReversal, declaró: «Básicamente, todo excepto el oro y el dólar probablemente se verán afectados». Ahora, Gromen considera que el oro y ciertas acciones son herramientas superiores para expresar la tesis del «debasement», relegando tácticamente a Bitcoin. Para sus seguidores, esto marca una transición significativa: de una visión estructuralmente alcista a una reducción táctica de exposición ante lo que percibe como vientos en contra.

Los Tres Pilares del Argumento Bajista de Gromen

El análisis de Gromen se sostiene sobre tres argumentos principales que explican su postura tácticamente bajista.

1. Debilidad Técnica y Comparativa

Gromen señala que Bitcoin ha fracasado en alcanzar nuevos máximos en su paridad con el oro (BTC/XAU), una métrica clave para los defensores del «debasement trade». Además, la ruptura a la baja de promedios móviles importantes, como la media de 200 días, actúa como una señal técnica de debilidad. La reciente caída por debajo de $90,000 a finales de noviembre de 2025 sería una evidencia de este deterioro en el gráfico.

2. El Ascenso de la Narrativa del «Riesgo Cuántico»

El analista argumenta que la preocupación por la computación cuántica ha evolucionado de ser un tema teórico a convertirse en una narrativa de mediano plazo que afecta al sentimiento del mercado. No se trata necesariamente de que el ataque sea inminente (la mayoría de criptógrafos lo considera lejano), sino de que este «ruido» está impactando la psicología de los inversores, generando dudas sobre la seguridad a largo plazo.

3. Incertidumbre Macroeconómica Agudizada

Gromen se hace eco de las dudas de otros analistas sobre la capacidad de Bitcoin para sostener el impulso posterior a la aprobación de los ETFs spot en EE.UU. A esto suma un entorno macroeconómico complejo, con datos débiles de empleo y consumo en EE.UU. y volatilidad en sectores como la Inteligencia Artificial, lo que genera una aversión general al riesgo que afecta también a los activos digitales.

La Respuesta de la Comunidad Bitcoin: Críticas y Contrapuntos

Frente a este análisis, la comunidad Bitcoin ha respondido con contrapuntos sólidos y argumentos fundamentados.

Análisis Técnico Superficial: Críticos como el analista onchain Checkmate argumentan que basar una postura en medias móviles rotas y en el rendimiento comparativo es equivalente a «vender en la debilidad», no a identificar un techo estructural. Señalan que la evidencia de Gromen parece extraída más de «narrativas en X» que de un análisis fundamental profundo.

Desmontando el Miedo Cuántico: Expertos como Troy Cross del Bitcoin Policy Institute profundizan en esta idea. Para Cross, la postura de Gromen es una operación basada en la percepción del riesgo, no en la realidad de la amenaza. Recuerdan que Bitcoin, como protocolo, tiene mecanismos de actualización (forks) para abordar este tipo de desafíos existenciales cuando sea necesario.

La Visión On-Chain y de Largo Plazo: Desde esta perspectiva, se priorizan métricas como la tasa de adopción, la potencia de la red (hash rate) y el comportamiento de los holders a largo plazo (HODLing) sobre el análisis técnico tradicional o las narrativas de corto plazo. Para ellos, estos fundamentales siguen siendo robustos.

El Panorama Complejo: Datos, Flujos y la Tesis de Largo Plazo

El debate, sin embargo, no es blanco o negro, y los datos pintan un panorama más matizado que merece ser analizado.

Los ETFs No Cuentan una Historia de Derrota: Es crucial matizar la narrativa. Si bien hubo salidas netas significativas en noviembre, los ETFs spot de Bitcoin en EE.UU. han registrado entradas netas modestas durante diciembre de 2025. Este dato indica una demanda institucional que muestra resiliencia, no una capitulación.

El «Debasement Trade» Sigue Vivo para Bitcoin: Aquí yace el punto más importante. Tanto Gromen como los más alcistas no abandonan la tesis macro de fondo. La devaluación fiduciaria es un proceso secular que continúa en 2025. La llamada de Gromen puede interpretarse, por tanto, no como un abandono de la idea, sino como un recordatorio pragmático: incluso los simpatizantes macro están dispuestos a reducir exposición tácticamente cuando los gráficos y las narrativas de corto plazo se alinean en su contra.

Conclusión: Ruido de Corto Plazo vs. Fundamentales de Largo Plazo

El choque entre el análisis macro-táctico de Luke Gromen y la visión de convicción a largo plazo de la comunidad Bitcoin sintetiza la madurez de este mercado. Para el inversor, este episodio subraya la importancia crítica de diferenciar entre el ruido de corto plazo—narrativas de miedo, señales técnicas—y los fundamentales de largo plazo—adopción, política monetaria, escasez programada.

La advertencia de Gromen, más que una profecía de derrota, sirve como un llamado válido a la prudencia y la gestión activa del riesgo. No invalida la propuesta de valor última de Bitcoin, pero sí recuerda que su camino no será lineal. En última instancia, la pregunta que cada inversor debe responder es la misma que resuena en este debate: ¿Es este un momento para tomar ganancias tácticamente o para acumular con una perspectiva de años? La respuesta dependerá de qué horizonte temporal y qué conjunto de datos priorice.


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