El proyecto cripto de la familia Trump: World Liberty Financial cierra 2025 con su token WLFI en picada (-40%)
El cierre del año 2025 ha dejado un sabor amargo para uno de los proyectos cripto más publicitados de la administración Trump. El token de gobernanza WLFI, la piedra angular del fondo World Liberty Financial (WLF), ha registrado una depreciación superior al 40% desde que comenzó a cotizar públicamente, encapsulando un año de volatilidad extrema y polémica constante. Lo que se anunció en 2024 como una audaz incursión de la familia Trump en las finanzas descentralizadas, prometiendo aprovechar el bull market, ha terminado el ciclo con un portafolio de activos que se ha reducido a casi la mitad de su valor máximo. Este artículo analiza el agitado recorrido, las cifras concretas y las controversias que han definido el primer año completo de este polémico fondo.
Los inicios y la arquitectura del proyecto
El proyecto se puso en marcha con un anuncio del presidente Donald Trump en septiembre de 2024, en plena campaña electoral, marcando un giro radical en la postura oficial de Estados Unidos hacia las criptomonedas. Bajo el liderazgo operativo de sus hijos, Donald Trump Jr. y Eric Trump, World Liberty Financial se estructuró como un fondo de inversión digital. Su activo central sería el token WLFI, un token de gobernanza lanzado para financiar una estrategia agresiva de adquisición de criptomonedas de gran capitalización.
La montaña rusa financiera en 2025: Cifras y resultados
El año comenzó con un impulso financiero significativo. Tras una primera venta de tokens en octubre de 2024, una segunda ronda entre enero y marzo de 2025 vendió 5.000 millones de WLFI a $0.05 cada uno, recaudando aproximadamente $250 millones. Con este capital, WLF se expandió rápidamente: lanzó su stablecoin USD1 en marzo, firmó un acuerdo de promoción con PancakeSwap en junio y, en agosto, cerró un masivo acuerdo de tesorería por $1.500 millones con ALT5 Sigma Corporation.
Durante el bull market, el fondo realizó compras agresivas, incluyendo $21.5 millones en WBTC, Ether y otros activos. Esta estrategia llevó el valor total de su portafolio a un pico de más de $17.000 millones en septiembre. Sin embargo, la tendencia se revirtió drásticamente. Para el 11 de diciembre de 2025, el valor había colapsado a apenas $8.000 millones, una caída del 47%. El token WLFI, reflejo de esta crisis, ha perdido más del 40% de su valor en el mercado público.
La sombra de la controversia: Conflictos de interés y acusaciones
El éxito financiero inicial pronto se vio opacado por cuestionamientos éticos y legales. La iniciativa rompió con la tradición de presidentes anteriores, como Jimmy Carter, quien utilizó un fideicomiso “ciego” para evitar conflictos. En abril de 2025, la senadora Elizabeth Warren y la representante Maxine Waters solicitaron formalmente a la SEC que preservara documentos del fondo, citando preocupaciones por un posible conflicto de interés del presidente en ejercicio.
Las acusaciones se intensificaron en noviembre, cuando el grupo Accountable.US publicó un reporte alegando que WLF había vendido tokens a individuos sancionados con vínculos con Irán, Corea del Norte y Rusia. La Casa Blanca, a través de su portavoz Karoline Leavitt, desestimó todas las acusaciones como “infundadas”, culpando a los medios de comunicación. Por su parte, WLF emitió un comunicado defendiendo sus estrictos controles contra el lavado de dinero (AML/KYC) y afirmando rechazar a compradores no verificados.
El ecosistema cripto de la familia Trump más allá de WLF
World Liberty Financial no es un proyecto aislado, sino parte de una estrategia cripto más amplia de la familia Trump. Truth.Fi, la rama financiera de Trump Media & Technology Group, adquirió 684.4 millones de tokens CRO (valorados en $104.7 millones) en un intercambio con Crypto.com en septiembre. Paralelamente, American Bitcoin, una empresa de minería fundada y respaldada por Eric y Donald Trump Jr., reportó poseer 4,784 BTC a principios de diciembre de 2025.
Mirando hacia 2026: ¿Recuperación o más riesgos?
Ante los malos resultados, la dirección de WLF busca un reinicio. El cofundador Zach Witkoff anunció el 3 de diciembre el lanzamiento inminente de una suite de Activos del Mundo Real (RWAs) a partir de enero de 2026. No obstante, los desafíos para el próximo año son formidables: recuperar el valor del portafolio, manejar la creciente presión regulatoria y política, y restaurar la credibilidad del proyecto tras graves acusaciones.
El primer año de World Liberty Financial se erige como un caso de estudio sobre los riesgos y complejidades en la intersección del poder político, las finanzas tradicionales y el volátil mundo de las criptomonedas.















