Andreessen Horowitz (a16z) recaudará $10.000 millones para IA y defensa, pero excluye cripto: Análisis de su estrategia en 2025
En el dinámico mundo del capital de riesgo, pocos nombres generan tanto impacto como Andreessen Horowitz, comúnmente conocido como a16z. Históricamente, este fondo ha sido un pilar en la financiación de innovaciones tecnológicas, con una presencia especialmente notable en el ecosistema cripto. Sin embargo, un reciente reporte del Financial Times publicado este jueves de 2025 ha sacudido al sector: a16z estaría en proceso de recaudar la astronómica cifra de $10.000 millones, destinados principalmente a inteligencia artificial y defensa, dejando por primera vez en años a las criptomonedas fuera de una ronda principal. Esta decisión plantea una pregunta crucial: ¿estamos ante un cambio estratégico fundamental o simplemente una pausa táctica?
Los detalles de una recaudación monumental
Según las informaciones, la estructura de esta mega-recaudación se distribuiría de la siguiente manera:
- $6.000 millones estarían reservados para empresas en etapas maduras de crecimiento.
- $1.500 millones se destinarían específicamente al desarrollo de aplicaciones de inteligencia artificial.
- Otros $1.500 millones se focalizarían en la infraestructura subyacente de IA.
- Más de $1.000 millones serían asignados a los sectores de defensa y manufactura avanzada.
El reporte, que cita fuentes anónimas familiarizadas con el proceso, subraya la escala y el enfoque deliberado de esta movida. La credibilidad del Financial Times añade un peso significativo a la noticia, situándola como un punto de inflexión en la estrategia de inversión de uno de los fondos más influyentes del mundo.
La ausencia de cripto: una omisión que resuena
Esta exclusión es particularmente llamativa si se considera el historial de a16z. La firma no solo creó una división especializada, a16z Crypto, sino que ha sido un actor fundamental en el crecimiento del ecosistema blockchain. Sus inversiones emblemáticas incluyen nombres como Coinbase, Uniswap, Dapper Labs y MakerDAO. Además, ha ejercido un lobby constante a favor de un marco regulatorio favorable para las criptomonedas en Estados Unidos.
La contradicción se agudiza al contrastar esta decisión con el último informe «State of Crypto» publicado por la propia a16z el miércoles de esta misma semana. Dicho documento pinta un panorama optimista: un mercado global en expansión, la adopción mainstream de las stablecoins y una creciente integración por parte de instituciones financieras tradicionales. Excluir las criptomonedas de su principal vehículo de recaudación parece, en superficie, contradecir directamente este optimismo declarado.
¿Abandono del sector o simple reposicionamiento?
A pesar de esta omisión, la evidencia sugiere que a16z no ha abandonado por completo el espacio cripto. Inversiones recientes, aunque de menor escala, demuestran un interés continuo. Ejemplos notables incluyen una ronda de $50 millones en Jito, un protocolo de staking líquido en la red Solana, y $55 millones en LayerZero, un protocolo especializado en interoperabilidad entre cadenas. Incluso su decisión de cerrar la oficina en el Reino Unido para concentrar esfuerzos en Estados Unidos puede interpretarse como un reenfoque, no una retirada.
Las posibles razones para esta exclusión temporal son varias:
- Un enfoque agresivo en sectores emergentes como la IA y la defensa, que actualmente presentan un potencial de rendimiento a corto plazo percibido como mayor.
- El entorno regulatorio para las criptomonedas sigue siendo incierto en muchas jurisdicciones, mientras que sectores como la IA y la defensa cuentan con un apoyo gubernamental más claro y predecible.
- Una simple estrategia de diversificación de su portafolio, rebalanceando la asignación de capital hacia áreas que consideran infravaloradas en este momento.
El debate más amplio sobre el capital riesgo en cripto
Esta decisión de a16z reaviva un debate fundamental sobre el papel del capital de riesgo en un ecosistema que idealmente promueve la descentralización. Joseph Lubin, co-fundador de Ethereum y figura clave en el espacio, ha ofrecido una perspectiva equilibrada. Reconoce que el objetivo principal de los fondos de capital de riesgo es, por naturaleza, extraer valor. No obstante, también destaca su papel innegable en impulsar la innovación y la descentralización durante los últimos años. Para Lubin, la situación actual «no es motivo de preocupación».
Por otro lado, voces como Federico Carrone han expresado cierta inquietud. Carrone advierte sobre el «riesgo de cola» que representan fondos de capital de riesgo masivos como Paradigm, sugiriendo que su influencia concentrada podría, con el tiempo, socavar los principios de descentralización que dieron origen a la tecnología blockchain.
El impacto en el ecosistema cripto
La reacción inmediata del mercado será crucial. Una movida de esta magnitud por parte de un líder indiscutible podría afectar la confianza de otros inversores y de las startups que buscan financiación. Sin embargo, es importante contextualizar: el ecosistema cripto ha demostrado una resiliencia notable. Tan solo esta semana se han registrado rondas de financiación que suman un récord de $3.500 millones, y casos de éxito como la valoración de $5.000 millones de Tempo, de Stripe, muestran que el capital fluye hacia proyectos sólidos más allá de las decisiones individuales de cualquier fondo.
Las tendencias de financiamiento en 2025 continúan mostrando un vigor significativo en subsectores como la infraestructura DeFi, las aplicaciones Web3 y los protocolos de escalabilidad, lo que indica que la ausencia de a16z en esta ronda podría crear oportunidades para otros fondos especializados.
Conclusión: Un cambio táctico, no un adiós
En resumen, la decisión de Andreessen Horowitz de excluir las criptomonedas de su ronda de $10.000 millones parece ser más un reajuste táctico que una deserción estratégica. La firma mantiene inversiones activas en el espacio, aunque con un apetito reducido en comparación con sectores como la IA y la defensa. Este movimiento refleja una evaluación fría de las oportunidades de mercado actuales y los panoramas regulatorios, más que una pérdida de fe en la tecnología blockchain subyacente.
La pregunta para la comunidad es si esto representa una señal de madurez, donde el ecosistema cripto ya no depende de unos pocos gigantes, o si es una advertencia sobre los desafíos de rentabilidad a corto plazo. Solo el tiempo, y las próximas movidas de a16z y sus competidores, darán la respuesta definitiva. Mientras tanto, el mercado sigue su marcha, demostrando una vez más su capacidad para evolucionar con o sin el respaldo total de cualquier inversor individual.