Bitcoin retrocede de $92,250: La incertidumbre económica frena a los traders profesionales en 2025

El camino de Bitcoin hacia nuevos máximos ha encontrado un obstáculo significativo. Tras acercarse a la resistencia clave de $92,250 a principios de diciembre de 2025, la principal criptomoneda experimentó un rechazo abrupto, cayendo alrededor de $2,650 en un movimiento que liquidó más de $92 millones en posiciones largas apalancadas.

Aunque el precio ha mostrado cierta resiliencia y se ha recuperado parcialmente, captando oferta en niveles más bajos, una mirada bajo el capó revela un panorama preocupante. Los datos de los mercados de derivados y los flujos de capital desde Asia pintan un cuadro de escepticismo profesional.

Esta pausa, ¿es una consolidación saludable antes del próximo impulso o el preludio de una corrección más profunda? El análisis sugiere que una tormenta de incertidumbre macroeconómica en Estados Unidos, combinada con señales de aversión al riesgo a nivel global, está creando un muro de preocupación que Bitcoin debe derribar para aspirar legítimamente a los $100,000.

El rechazo en $92,250 y la liquidación en masa: Un recordatorio de volatilidad

El movimiento fue rápido y contundente. El rechazo en el nivel de $92,250, que representaba el techo del rango de negociación a corto plazo, desencadenó una caída que llevó a Bitcoin a rozar los $90,000.

Este declive no fue un evento aislado en el ecosistema cripto; coincidió con una reversión en los mercados de valores de Wall Street, donde las preocupaciones por un posible debilitamiento del mercado laboral y las valoraciones excesivas en el sector de la inteligencia artificial pesaron sobre el sentimiento.

Este episodio sirve como un recordatorio crudo de la volatilidad inherente al mercado, especialmente cuando se combina con el apalancamiento excesivo. Cabe recordar que, incluso antes de este retroceso, Bitcoin ya cargaba con un descenso del 28% desde su máximo histórico alcanzado en octubre de 2024.

La tormenta perfecta: Datos retrasados, empleo y vivienda en EE.UU.

El telón de fondo de esta cautela es una triple incertidumbre macroeconómica en Estados Unidos:

1. El vacío de información oficial

El cierre de fondos gubernamentales de 43 días, finalizado en noviembre de 2024, tuvo un efecto colateral persistente: retrasó y distorsionó la publicación de datos económicos oficiales clave. Los traders institucionales y profesionales se encuentran operando con una visibilidad reducida sobre el estado real de la inflación y el empleo, lo que frena naturalmente la toma de decisiones de riesgo elevado.

2. Señales débiles del mercado laboral

Mientras el consenso del mercado anticipa un recorte de tasas de la Fed de 0.25% en diciembre, las señales del terreno son mixtas. Un reporte privado de despidos de noviembre, que mostró 71,321 recortes de personal, actuó como un balde de agua fría, contrarrestando el optimismo generado por la posible acción del banco central.

3. Grietas en el mercado inmobiliario

Quizás la señal más alarmante proviene del sector de la vivienda, un pilar fundamental de la economía estadounidense. Los datos son elocuentes: la firma Redfin reportó que un 15% de los acuerdos de compra de vivienda se cancelaron en octubre de 2024. Paralelamente, CNBC documentó un aumento del 38% en las bajas de listados (delistings) desde octubre y, por primera vez en años, una caída interanual del 0.4% en el precio de lista mediano en noviembre. Esta debilidad genera dudas sobre la solidez del consumidor estadounidense.

Lo que dicen los futuros y las opciones: Protección costosa

Los traders profesionales, que operan principalmente a través de derivados, están transmitiendo un mensaje de precaución:

Futuros: La falta de apetito por el apalancamiento alcista

Un termómetro clave es la «tasa de base» (basis rate), que mide la prima de los futuros frente al precio spot. Cuando los actores del mercado están optimistas y buscan apalancamiento, esta tasa se dispara. Sin embargo, los datos de Laevitas.ch muestran que la tasa se ha mantenido por debajo del umbral neutral del 5% durante dos semanas consecutivas, indicando una demanda notablemente débil para apostar agresivamente al alza.

Opciones: Los «whales» pagan caro por asegurarse

El sentimiento se lee aún más claro en el mercado de opciones, a través del «sesgo» (skew) entre puts (de venta) y calls (de compra). Actualmente, en plataformas como Deribit, los creadores de mercado exigen una prima del 13% para vender opciones put de protección. Este encarecimiento de los seguros contra caídas es una señal típica de entornos de aversión al riesgo o bajistas, donde los grandes jugadores están dispuestos a pagar mucho para cubrir sus posiciones.

China: El descuento en stablecoins como termómetro del miedo

La señal de aversión al riesgo tiene un eco fuerte en Asia. En condiciones normales, el stablecoin USDT cotiza en los mercados over-the-counter (OTC) de China con una pequeña prima (entre 0.2% y 1%) frente al yuan, debido a las fricciones regulatorias para acceder a criptomonedas.

Sin embargo, el gráfico de OKX muestra una dinámica inversa: el USDT/CNY cotiza con un descuento sostenido respecto a la tasa oficial. Esto indica una fuerte demanda de los holders por vender sus USDT y convertirlos a yuanes fiduciarios, un flujo de salida claro del ecosistema cripto. Es un patrón clásico de «risk-off» que apunta a una perspectiva bajista a corto plazo.

Los ETFs spot pierden impulso: El capital institucional en pausa

Completando este cuadro de pausa está el silencio en un frente que antes era ruidoso: los ETFs de Bitcoin spot en Estados Unidos. El flujo de entrada de capital institucional neto, que fue un motor crucial durante gran parte de 2024 y principios de 2025, se ha estancado en las últimas semanas. Esto sugiere que incluso los grandes gestores de activos están adoptando una postura de espera, a la expectativa de una mayor claridad en el panorama macroeconómico antes de comprometer nuevo capital.

¿Camino a $100,000? Las condiciones que Bitcoin necesita

En resumen, Bitcoin se encuentra en un compás de espera forzado por tres factores principales: la incertidumbre macroeconómica en EE.UU., el escepticismo reflejado en los mercados de derivados y la salida de capitales de aversión al riesgo desde Asia.

Un posible recorte de tasas de la Fed podría ofrecer un alivio temporal y un «rally de alivio». Sin embargo, para que Bitcoin recupere un impulso sostenido y creíble hacia los $100,000, necesitará algo más que un movimiento ampliamente anticipado por el banco central.

El mercado requiere señales más claras y positivas sobre la salud subyacente de la economía estadounidense, particularmente en el mercado laboral y el sector inmobiliario. Esta claridad puede tardar semanas, o incluso meses, en materializarse.

La pregunta final para los inversores es: ¿Los fundamentos a largo plazo de Bitcoin –su escasez programada y su propuesta de valor como reserva no soberana– serán suficientes para navegar y eventualmente superar esta fase de turbulencia macroeconómica a corto plazo? La respuesta definiría no solo el curso de las próximas semanas, sino la narrativa para el resto de 2025.

Descargo de responsabilidad: Este artículo es solo para fines informativos y no constituye asesoramiento financiero. El contenido representa la opinión del autor y no debe ser tomado como una recomendación de inversión. Los mercados de criptoactivos son volátiles; realice su propia investigación antes de tomar cualquier decisión financiera.