Custodia Bank vs. La Fed: La batalla legal por la cuenta maestra que define el futuro de la banca cripto en 2025
En 2025, la narrativa política en Estados Unidos parece haber girado a favor de la innovación financiera y los activos digitales. Sin embargo, una brecha profunda separa la retórica de la realidad operativa para las empresas del sector. Este contraste se hace palpable en la renovada batalla legal de Custodia Bank, el banco cripto fundado por Caitlin Long, que ha presentado una petición de «rehearing en banc» ante la Corte de Apelaciones del Décimo Circuito. Su objetivo es revertir la negativa de la Reserva Federal a concederle una cuenta maestra, una decisión que un panel de la misma corte ratificó en octubre.
Este caso no es un mero litigio aislado; es un punto de inflexión que examina la posibilidad real de integrar instituciones cripto en el núcleo del sistema financiero tradicional. Al analizar sus implicaciones y contrastarlo con ejemplos de adopción pragmática, como el modelo de recompensas en Bitcoin de la fintech europea seQura, se revelan los dos caminos divergentes que la industria puede seguir.
El movimiento legal de Custodia Bank: Detalles y argumentos clave
Tras la derrota ante un panel de tres jueces, Custodia Bank ha elevado el tono de su desafío. La petición de «rehearing en banc», presentada en noviembre de 2025, solicita que todos los jueces activos del Décimo Circuito revisen el caso. Este procedimiento es significativamente más gravitante que una apelación común, ya que implica una reconsideración por parte de la mayoría de la corte, ofreciendo la posibilidad de anular la decisión previa y sentar un precedente legal más sólido. Es un movimiento estratégico de alto riesgo que subraya la importancia fundamental que Custodia otorga a este fallo.
El núcleo del argumento legal: La Ley de Control Monetario y la autoridad estatal
El corazón del recurso de Custodia es una acusación de mala interpretación legal. El banco argumenta que el panel de apelaciones erró al interpretar la Ley de Control Monetaria, una legislación que, en su lectura, otorga el derecho a una cuenta maestra a cualquier institución depositaria que cumpla con los requisitos básicos. La petición es contundente al señalar las consecuencias de la negativa de la Fed:
«Cuando la Fed niega una cuenta maestra a una institución financiera autorizada por un estado, efectivamente veta una carta bancaria que los reguladores estatales han aprobado».
Esta afirmación trasciende lo administrativo para adentrarse en lo constitucional. Custodia alega que la postura de la Reserva Federal plantea «serias cuestiones constitucionales» sobre la estructura misma de la Fed y el delicado equilibrio de poder entre las autoridades bancarias estatales y federales, un principio fundacional de la banca dual estadounidense.
La cuenta maestra de la Fed: El «Santo Grial» para Custodia
Una cuenta maestra en la Reserva Federal es más que una simple cuenta bancaria; es un pase de acceso al sistema de pagos central del país. Permite a una institución mantener reservas directamente en el banco central y operar en sus redes centrales, como Fedwire y el sistema ACH, sin necesidad de un intermediario.
Para un banco cripto como Custodia, obtenerla sería transformador. Implicaría liquidar transacciones directamente en dinero del banco central, eliminando el riesgo de contraparte asociado a depender de un banco corresponsal tradicional. Esto se traduce en la erradicación de costos adicionales, retrasos operativos y una capa de riesgo sistémico, proporcionando una eficiencia y una estabilidad operativa que hoy son inalcanzables.
Caitlin Long lo ha resumido con una analogía elocuente, comparando los niveles de acceso al sistema: si tener una cuenta maestra es el «diamante», Custodia, a pesar de su carta bancaria estatal, se encuentra en un nivel inferior. Long también ha destacado que, en la práctica, Custodia y Kraken Financial son percibidos como los «únicos dos» bancos cripto con licencia en EE.UU., haciendo aún más urgente la resolución de su estatus.
Antecedentes y el problema sistémico de la «Debankización»
Una lucha de años: La travesía de Custodia
La petición actual es el último capítulo de una odisea regulatoria que comenzó en 2020, con la fundación del banco y su solicitud inicial. El primer golpe llegó en enero de 2023, cuando la Fed de Kansas City denegó formalmente la cuenta maestra. Poco después, la Fed también rechazó su solicitud para ser miembro del Sistema de la Reserva Federal. La derrota ante el panel del Décimo Circuito en octubre de 2025 parecía cerrar la puerta, pero la apelación «en banc» demuestra que la batalla está lejos de terminar.
Más que un caso aislado: El fantasma de la «debankización»
El caso de Custodia es la punta del iceberg de un fenómeno sistémico conocido como «debankización». Informes de reguladores estadounidenses han señalado cómo al menos nueve grandes bancos han restringido o cerrado servicios a empresas de criptoactivos, creando un entorno hostil para la innovación. Esta realidad contrasta con el discurso político.
En marzo de 2025, la propia Caitlin Long ofreció una crítica mordaz, declarando que el gobierno actual «no ha hecho nada» para resolver el problema de la debankización. Su observación subraya la desconexión persistente: mientras se habla de liderazgo en cripto, en la práctica, las empresas luchan por obtener servicios bancarios básicos.
Caso de estudio: Contraste con la adopción en retail (seQura)
Mientras en Estados Unidos se libra una batalla legal por la inclusión financiera, en otros mercados la adopción cripto avanza a través de modelos pragmáticos centrados en el usuario. Un ejemplo paradigmático es la evolución de la fintech española seQura.
De pagos flexibles a recompensas en Bitcoin: La evolución de seQura
seQura ha transitado desde ser una plataforma de financiación al consumo hacia un modelo de «smart shopping». Su aplicación permite a los usuarios descubrir productos, elegir entre múltiples opciones de pago, beneficiarse de protecciones al comprador y, lo más innovador, recibir recompensas por sus compras a través de un agente de búsqueda integrado.
Bitcoin como lealtad real: El mecanismo no custodio
La gran apuesta de seQura, lanzada el 11 de noviembre de 2025, es ofrecer recompensas en Bitcoin. El dato es revelador: el 40% de los nuevos usuarios ya elige esta opción. El mecanismo es clave: tras el período de devolución, el usuario puede optar por recibir un saldo en euros o que su recompensa en Bitcoin sea enviada directamente a su cartera personal externa.
Este modelo no custodio es una decisión tanto regulatoria como filosófica. Otorga al usuario la propiedad real del activo, alinea los incentivos con los principios de autosoberanía y se complementa con guías educativas. Adrián Escudé, de seQura, ha explicado que este enfoque busca construir «un puente a largo plazo entre el gasto minorista y los incentivos de dinero sólido».
Hoja de ruta y señales de adopción
La visión de seQura es de expansión continua. Su hoja de ruta incluye el lanzamiento de un portal de viajes con un 5% de cashback en Bitcoin, la expansión a Europa del Sur en 2026 y planes de lanzamiento fuera de Europa. Además, para 2026 tienen programada la integración técnica de la Lightning Network, lo que permitirá recompensas en Bitcoin instantáneas y de bajo costo, democratizando aún más el acceso.
Conclusión y perspectivas de futuro
El panorama actual presenta una dicotomía fascinante. Por un lado, está el camino de la confrontación y la integración formal, encarnado por la batalla legal de Custodia Bank por acceder al sistema de la Reserva Federal. Por el otro, está el camino de la innovación paralela y la adopción orgánica, representado por empresas como seQura, que construyen puentes funcionales entre el comercio tradicional y los activos digitales sin pedir permiso al núcleo del sistema bancario.
El desenlace del caso de Custodia ante el Décimo Circuito —y su posible escalada a la Corte Suprema— tiene el potencial de sentar un precedente histórico. Puede desbloquear una nueva era de banca cripto integrada en Estados Unidos o, por el contrario, consagrar la debankización como una barrera estructural.
Mientras tanto, en otras latitudes, la adopción sigue su curso, demostrando que la demanda de soluciones financieras innovadoras y centradas en el usuario es un fenómeno global e imparable. La pregunta final es si ambos caminos podrán converger o si, forzosamente, uno definirá el paisaje financiero del futuro.












