La SEC de Tailandia allana sitio de escaneo de iris de World por operaciones sin licencia del token WLD
En un nuevo capítulo regulatorio para los proyectos de criptoactivos vinculados a identidad digital, las autoridades tailandesas han allanado un centro de escaneo de iris vinculado a World, el proyecto de identificación digital liderado por Sam Altman, CEO de OpenAI. Esta acción conjunta entre la Comisión de Bolsa y Valores de Tailandia (SEC) y la División de Supresión del Crimen Económico (CCIB) marca otro desafío legal significativo para Altman en el sudeste asiático, añadiéndose a las restricciones ya enfrentadas en países como España, Portugal y Kenia.
Detalles operativos y marco legal de la redada
La redada, anunciada oficialmente en enero de 2025, se produjo como parte de una investigación sobre presuntas operaciones de intercambio del token WLD realizadas sin la licencia requerida bajo la Ley de Activos Digitales tailandesa (BE 2561). Durante el operativo, las autoridades incautaron equipos de escaneo y detuvieron a varios sospechosos vinculados a las actividades investigadas.
El marco legal tailandés establece requisitos estrictos para cualquier entidad que opere con criptoactivos, contemplando sanciones que incluyen multas sustanciales y posibles penas de prisión para quienes realicen estas actividades sin la debida autorización. Como declaró formalmente un representante de las autoridades: «El investigador ha arrestado a sospechosos por cometer el delito de apoyar servicios de intercambio de activos digitales sin licencia».
El modelo operativo de World y su postura oficial
Frente a estos desarrollos, World mantiene en su sitio web oficial que la distribución de WLD solo ocurre en «jurisdicciones donde las leyes lo permiten», estableciendo restricciones basadas en geografía, edad y otros factores. Sin embargo, los datos muestran una presencia significativa en Tailandia, con 102 dispositivos de escaneo de iris («Orbes») operando en el país, ofreciendo tokens WLD a cambio de la verificación biométrica.
Resulta particularmente relevante la posición de la empresa respecto a la disponibilidad de su token, ya que Tools for Humanity, desarrolladora detrás de World, se ha deslindado tradicionalmente de la comercialización de WLD en exchanges centralizados o descentralizados, argumentando que esto escapa a su control directo.
Implicaciones para Sam Altman y el ecosistema Web3
Este incidente representa un nuevo golpe a la reputación de Sam Altman en el espacio de tecnología blockchain, particularmente considerando que OpenAI continúa expandiendo sus operaciones globales. Para los usuarios tailandeses que participaron en el programa de recompensas, surgen preguntas críticas sobre la legalidad de sus participaciones y la protección de sus datos biométricos en un entorno ahora cuestionado regulatoriamente.
El caso refleja una tendencia global creciente: el escrutinio regulatorio sobre proyectos que combinan identidad digital con criptoactivos se intensifica, especialmente en economías emergentes donde los marcos legales están evolucionando rápidamente.
Contexto del token WLD y situación de mercado
Técnicamente, WLD funciona como token de utilidad dentro del ecosistema World, proporcionando acceso a servicios y mecanismos de gobernanza. Al momento de los eventos, su cotización se mantenía alrededor de $0.88, mostrando cierta resiliencia frente a las noticias regulatorias, aunque analistas advierten sobre posible volatilidad conforme avance el proceso legal en Tailandia.
La presencia de 102 dispositivos de escaneo sugiere un nivel significativo de adopción en el mercado tailandés, lo que hace particularmente relevante el impacto potencial de estas medidas regulatorias sobre la liquidez y acceso al token en la región.
Reacciones y desarrollos esperados
Hasta el momento, Tools for Humanity ha mantenido silencio sobre los eventos en Tailandia, siguiendo un patrón observado en crisis regulatorias anteriores. Cointelegraph intentó obtener declaraciones de la empresa sin recibir respuesta, lo que sugiere una estrategia comunicativa cautelosa.
Los escenarios posibles incluyen desde negociaciones con autoridades tailandesas para regularizar las operaciones, hasta un retiro temporal de servicios similar al implementado en otros países donde enfrentaron obstáculos legales. Como señaló un analista legal especializado en criptoactivos: «Este caso sienta un precedente importante para proyectos de identidad digital en Asia, particularmente respecto a cómo manejan el cumplimiento normativo a través de jurisdicciones fragmentadas».
Reflexiones finales sobre el caso World en Tailandia
El caso de World en Tailandia ilustra claramente la tensión persistente entre innovación en identidad digital y cumplimiento regulatorio. Para proyectos con ambición global como World, la fragmentación de marcos legales representa un desafío operativo continuo que requiere estrategias más sofisticadas de gestión regulatoria.
Inversores y usuarios en mercados emergentes deberían mantener una vigilancia particular sobre estos desarrollos, mientras la industria Web3 continúa abogando por una mayor claridad regulatoria que permita innovar protegiendo adecuadamente a los consumidores. La evolución de este caso en Tailandia probablemente influirá en cómo otros países de la región aborden proyectos similares que combinan identidad digital con criptoeconomía.













