Tim Scott Impulsa Votación de Ley de Cripto en Diciembre: Camino Hacia la Regulación en EE.UU. en 2025
El proyecto de ley de estructura de mercado de cripto avanza en el Senado, con miras a ser firmado por el presidente Trump a principios de 2026.
Introducción
En un momento crucial para la industria de las criptomonedas, Estados Unidos se encuentra al borde de establecer un marco regulatorio integral. El senador Tim Scott, presidente del influyente Comité Bancario del Senado, ha anunciado avances significativos que podrían materializarse en una votación decisiva este diciembre de 2025. Este movimiento representa un paso pivotal en el largo camino hacia la claridad regulatoria, un objetivo que ha eludido al sector durante años.
Antecedentes del Proyecto de Ley
El impulso regulatorio comenzó con la aprobación en la Cámara de Representantes, en julio de 2025, de la Ley CLARITY. Esta legislación busca delimitar claramente las competencias entre la Comisión de Comercio de Futuros (CFTC) y la Comisión de Valores (SEC).
Desde entonces, el foco se ha trasladado al Senado, donde republicanos y demócratas han estado negociando para adaptar la ley. La complejidad jurisdiccional es evidente: el Comité Bancario del Senado, presidido por Scott, supervisa a la SEC y las leyes de valores, mientras que el Comité de Agricultura tiene jurisdicción sobre la CFTC.
Los borradores de discusión publicados en julio y noviembre de este año reflejan un proceso deliberativo, con flexibilidad incorporada para enmiendas y ajustes.
Declaraciones de Tim Scott y Avances Recientes
En una reciente entrevista en Fox Business, el senador Scott expresó un optimismo cauteloso, aunque no exento de críticas. Acusó abiertamente a algunos miembros demócratas de retrasar las negociaciones, pero confirmó el objetivo de llevar el proyecto de ley a votación en los comités durante diciembre.
Su meta declarada es ambiciosa: enviar la legislación al pleno del Senado a principios de 2026 y, en última instancia, «convertir a EE.UU. en la capital mundial de las cripto». Esta declaración subraya la dimensión geopolítica y económica de la propuesta legislativa.
Apoyo del Sector Privado: Brian Armstrong (Coinbase)
El sector privado no ha sido un mero espectador. Brian Armstrong, CEO de Coinbase, ha estado ejerciendo una presión activa en Washington. Su testimonio y declaraciones públicas han sido fundamentales para mantener el impulso.
Armstrong ha señalado que se ha logrado un «progreso significativo» en las negociaciones y calificó la potencial ley como un «hito» que podría «desbloquear el potencial» de toda la industria al establecer reglas del juego claras. Este respaldo de una de las figuras más visibles del ecosistema refuerza la percepción de que la ley beneficiaría no solo a las empresas establecidas, sino a todo el entorno de innovación cripto.
Otros Proyectos de Ley Relacionados
Es importante contextualizar la Ley CLARITY dentro de un paquete legislativo más amplio. Aprobadas por la Cámara en la misma sesión de julio de 2025, otras dos iniciativas complementan este esfuerzo regulatorio:
- La Ley GENIUS, que se enfoca en la regulación de las stablecoins
- La Ley Anti-CBDC, que busca prohibir la emisión de monedas digitales de bancos centrales
Juntas, estas tres leyes representan un enfoque integral del Congreso para abordar los distintos aspectos del universo de los activos digitales.
Próximos Pasos y Proceso Legislativo
El camino por delante está marcado por hitos procesales específicos. Se espera que en diciembre de 2025 los comités correspondientes realicen la «marcación» del texto, un proceso donde se debaten y añaden enmiendas para consolidar una versión final.
Posteriormente, el proyecto de ley pasará al pleno del Senado, donde necesitará alcanzar el umbral de 60 votos para su aprobación, un desafío considerando la actual composición de 53 republicanos y 47 demócratas.
Si el Senado modifica la versión original de la Cámara, el texto deberá ser devuelto para su conciliación. El paso final sería la firma del presidente Donald Trump, lo que convertiría la legislación en ley a principios de 2026.
Implicaciones y Perspectivas
Las implicaciones de una ley de esta naturaleza son profundas. En primer lugar, proporcionaría la tan anhelada claridad regulatoria, distinguiendo definitivamente qué criptoactivos son commodities y cuáles son valores. Esta distinción es la base para un mercado operativo y seguro.
En segundo lugar, posicionaría a Estados Unidos de manera más competitiva frente a jurisdicciones como la Unión Europea, que ya cuenta con su propio marco regulatorio, MiCA.
Por último, generaría seguridad jurídica para exchanges, inversores institucionales y emprendedores, fomentando la innovación y la inversión dentro del país.
Conclusión
Los avances impulsados por el senador Tim Scott representan un punto de inflexión en la relación entre Washington y la industria de las criptomonedas. Los esfuerzos bipartidistas, aunque con roces, muestran un reconocimiento colectivo de la importancia de actuar.
Los plazos establecidos para diciembre de 2025 y principios de 2026 son ambiciosos pero alcanzables. El éxito de esta iniciativa no solo definiría el futuro regulatorio de los activos digitales en Estados Unidos, sino que enviaría una señal contundente al mundo.
Estaremos atentos a las actualizaciones de este diciembre crucial, un mes que podría marcar el inicio de una nueva era para las cripto en la economía global.














